Anderson Daronco y su arbitraje de altura

Agencia Informativa Acord Antioquia

El árbitro Anderson Daronco hizo un juzgamiento a la altura del partido número 3, por la fase de grupos de la Copa Conmebol Libertadores 2023. Y no solo por su estatura de casi 1.90 metros, sino que lo dirigió con profesionalismo y con entereza, para aplicar los reglamentos tanto el contemplado en las 17 reglas con que se juega el fútbol sino también el de competencia de esta versión de la Copa.

Es que el musculoso árbitro brasileño, nacido en Santa María, estado de Río Grande do Sul, el 5 de enero de 1981, realizó una buena presentación en el empate a dos goles entre Atlético Nacional y Olimpia, en Estadio Atanasio Girardot, de Medellín.
El llamado “Juez fortachón” no solo infundió respeto por su musculoso biotipo sino por el conocimiento cabal de las normas, a las que apeló con un ingrediente valioso en el juzgamiento del fútbol: la ventaja.

Dice la norma que: “El árbitro permitirá que el juego prosiga si el equipo que sufre la infracción se beneficiará de la ventaja tras la acción, y sancionará la infracción cometida si no se produjera la situación ventajosa de manera inmediata o transcurridos unos pocos segundos” (Regla 5).

En esto fue acertado el árbitro de Brasil y con otro ingrediente importante: después de otorgar la ventaja y luego de terminar la jugada, con la detención del partido, tomó la medida disciplinaria respectiva.

Sí, en el primer partido juzgado a Atlético Nacional por Copa Libertadores y en el quinto a Olimpia, el juez central cumplió reglamentariamente con la dirección del choque futbolero.

En lo técnico, estuvo atento a sus asistentes #1, Rodrigo Correa, y #2, Rafael Alves. Para determinar y sancionar las faltas, especialmente a los banderazos del fuera de juego (regla 11) e igualmente para hacer recorridos rápidos, que le permitieron actuar con un sano Criterio Arbitral (SCA) para la interpretación de las faltas, entre lo real y lo simulado de las mismas.

Solo un lunar: permitir el zafarrancho que se armó luego del gol de Dorlan Pabón. Dice la regla 8 (inicio y reinicio del partido) que: “El juego se iniciará con un saque inicial —también denominado saque de centro— al comienzo de cada uno de los dos periodos de un partido, del tiempo suplementario y después de la anotación de un gol”.

En la reanudación del juego después de la anotación de Pabón, Candelo obstruyó y no conservó la distancia para el actuar conforme a la norma de Olimpia. Los jugadores se fueron a las manos, empujones que van y vienen y Daronco, un poco desconcentrado, no actuó con celeridad ante esta pequeña hecatombe deportiva. Al final le dio solución al altercado amonestando a Candelo, el infractor nacionalista, y a Guillermo Paiva (28’).

Las otras medidas disciplinarias fueron para los paraguayos: Fernando Cardozo (72′) y Juan Romero (88′). La roja la vio Romero (94′), quien fue reincidente en las faltas, causal de amarilla, pero que, en tan solo 15 minutos dentro del terreno de juego, infringió las normas atinentes a las faltas graves para Tiro Libre Directo acudiendo muchas veces al juego brusco grave, causal de expulsión.
Así, el juez central, y en su partido 24 por Copa Libertadores, completó 99 amonestaciones y 6 rojas, 3 de ellas por doble amarilla., para realizar un juzgamiento de altura.

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